Mirada crítica
Los ausentes y las "luchas seleccionadas" de Venado Tuerto
El autor de la columna de opinión, presente en la convocatoria, comparte su análisis, y sus emociones, al cabo de la primera manifestación local contra las políticas de Milei.
Por Mauro Bertozzi (*)
Ayer concurrí a otra manifestación, a una más, en la plaza San Martín, convocada por los hombres y mujeres de la cultura venadenses, en repudio al DNU y la Ley Ómnibus del nuevo gobierno nacional.
Lo hice totalmente en contra de muchas convicciones propias. Dirimir entre una cuestión personal y el apoyo al arte local. Fue un momento interesante. ¡No recuerdo otra juntada de unos con otros! Es que los artistas en la ciudad tienen sus propios egos. Pulidos, lustrados, encerados y laqueados, en algunos casos. El arte en la ciudad actúa como células independientes, donde cada agrupación es, sin querer, el espejo de otras.
Yo no me siento parte, pero sí entiendo la lucha. Este sábado 30, bajo la tradicional tibieza que caracteriza a las manifestaciones artísticas, con el apoyo de muchos referentes de varias áreas, se sintió el peso de los que nunca ponen por sobre su trayectoria, la ayuda a sus pares. ¡Fuimos 300! Y parece que las termopilas imaginadas en los centenarios eucaliptos, hacían la actual remake de los espartanos, ayer constituidos en cada artista.
Los grandes ausentes... ya sabemos todo eso.
Vi las arrugas del Colo, los ojos de Agustín, la inquietud de Paul, la responsabilidad de Miriam, el incansable Gabriel, la serenidad de Hugo, la sonrisa de Nacho. El apoyo de quienes bajo cierta incomodidad, a pesar de eso estaban.
Bibliotecas ausentes; el Verdi ausente; las murgas ausentes; los fotógrafos, filmadores, DJ's y organizadores de eventos, ausentes; directores de cine y teatros, ausentes; librerías ausentes; artistas callejeros ausentes; directivos de instituciones, ausentes. Muchos medios ausentes. La banda Cayetano Silva, ausente.
Yo mismo estaba ausente hasta un minuto antes de pisar la plaza. No los juzgo, pero sí hago el recuento.
En la vereda, frente a la plaza, justo cruzaba un camión de logística de YPF, y entre Elsa y Norma nos miramos, como armando esa postal de incertidumbre. Y es que ya vimos esos fantasmas en algún lugar.
Cosas que pasaron ayer. Ya sucedieron, ya es tarde, ayer fue la primera batalla, en mi opinión, la perdimos, porque el enemigo está siempre dentro, en el egocentrismo.
(*) Historiador revisionista y autor de los libros “Venado del 1900”, “Linaje francés en la pampa” y “50 Años del Barrio Provincias Unidas”.