Centro norte santafesino
Los cultivos se beneficiaron con las últimas lluvias
En el centro norte santafesino, las precipitaciones pusieron fin a dos semanas de sequía e intenso calor que mermaron un 10 % la campaña gruesa.
(Por Federico Aguer) - El Sistema de Estimaciones Agrícolas publicado hoy destaca que los lotes con cultivos de soja temprana, soja tardía, maíz temprano y maíz tardío, se encuentran en diferentes estados fenológicos. Y que mostraron reacciones favorables después de las precipitaciones que revirtieron los síntomas de estrés hídrico y térmico. La semana se caracterizó en sus primeros días, por condiciones de estabilidad climática, buen tiempo, soleado, temperaturas medias diarias altas, ambiente seco o muy seco que influyeron en los cultivares. Pero a mediados del viernes 9 cambió a cubierto, con inestabilidad con precipitaciones de variadas intensidades e irregular distribución geográfica.
El proceso de cosecha de girasol se concretó solo un par de días, en el centro y sur del área de estudio, y luego se interrumpió por las condiciones climáticas. Para el lapso comprendido entre el 14 y el 20 de febrero, los pronósticos prevén desde su comienzo, estabilidad climática, buen tiempo, alguna nubosidad parcial, soleado, temperaturas medias diarias levemente altas, situación y condiciones meteorológicas que se mantendrían hasta el final del intervalo, en todos los departamentos del SEA. Las temperaturas diarias fluctuarían entre mínimas de 13 a 23 ºC y máximas de 25 a 35 ºC
Se retomó la cosecha de girasol
La realidad del cultivo de girasol presentó una vez más dos escenarios bien diferenciados, ya que en la zona norte finalizó la cosecha de una compleja campaña gruesa. Los rendimientos promedios alcanzaron valores mínimos que oscilaron desde 09 a 12 qq/ha y máximos de 16 - 17 qq/ha a 20 - 24 qq/ha. Mientras tanto, en el centro y sur, a los cultivares se los encontró en etapa de fructificación. En estado bueno a muy bueno como resultado de las condiciones climáticas que reinaron.
"Continuó lentamente el proceso de cosecha, regulado por el avance de las etapas de maduración fisiológica, particularmente en el centro norte de los departamentos Las Colonias, La Capital, San Cristóbal y Castellanos. Los rendimientos promedios, con cambios a los enunciados la semana anterior, marcaron un leve aumento, los que oscilaron con valores mínimos desde 14 a 16 qq/ha y máximos de 23 a 25 qq/ha, con lotes puntuales de hasta 27 qq/ha. En general, el estado de las parcelas continuó siendo de bueno a muy bueno, pero el principal inconveniente, nuevamente lo provocó el número de aves, especialmente palomas, en la etapa de madurez de la oleaginosa".
El maíz se recupera
El período soleado, con temperaturas diarias altas a muy altas y ambiente seco, aceleró la evolución o desarrollo de los cultivares de maíz temprano. "Se complicó el estadio de fin de floración en la zona sur, de fructificación en el centro del SEA, en el norte dicha realidad favoreció la pérdida de humedad del grano y avanzó con cierto ritmo el proceso de cosecha (grano comercial), que había comenzado días atrás, en el sector noreste".
El informe resalta que los rendimientos promedios mínimos obtenidos oscilaron desde 45 a 47 qq/ha, con máximos de 60 a 63 qq/ha y en lotes puntuales se alcanzaron 65 qq/ha. Así también, en el área de influencia de las cuencas lecheras del centro y norte santafesino, se incrementaron las tareas de picado/embolsado de los maizales tempranos para autoconsumo, con rendimientos promedios que en un inicio fueron de 13 - 14 m/bolsa/ha, a medida que se sumaron más parcelas, los mismos se acrecentaron de 16 - 17 m/bolsa/ha, hasta máximos de 19 m/bolsa/ha.
Sin embargo, las características climáticas que imperaron alteraron el normal desarrollo de los maizales e impactaron en sus estados, aceleraron el proceso de maduración, por lo que disminuyó la calidad y la cantidad del producto obtenido.
La soja tiene estrés
Dadas las condiciones ambientales de los primeros días de la semana, los cultivares de soja temprana nuevamente manifestaron síntomas de estrés hídrico y térmico. A posteriori, las precipitaciones y el descenso de las temperaturas revirtieron las situaciones, por lo que se observaron reacciones favorables de los sojales. En las próximas jornadas continuarían las evaluaciones para una fehaciente determinación de los grados de impactos o daños registrados.
El algodón y el agua
Período que comenzó con similares situaciones que el anterior, estabilidad climática y condiciones totalmente estresantes, por lo que el algodón se vio otra vez afectado por falta de humedad y elevadas temperaturas, siempre en estado fenológico de floración y formación de cápsulas. Precipitaciones, de variadas intensidades y distribución, modificaron el escenario, los cultivares expresaron reacciones rápidas y favorables en su desarrollo. A los algodonales se los encontró en estado bueno a muy bueno, con lotes excelentes.
Pero, bajo las condiciones climáticas previstas se verían seriamente afectados, comprometiendo su rendimiento, por encontrarse en una etapa crítica de evolución. En la zona del oeste, con inferiores precipitaciones que se dieron con respecto al este, se observaron lotes en estado regular a malo, por déficit hídrico y estrés térmico.
Continuaron las recorridas y los monitoreos para una temprana detección o despliegue de tareas de control de la principal plaga del cultivo, el picudo del algodón, ya que, las condiciones ambientales favorecieron su aparición. También se constató la presencia de pulgones y trips.