Por Roberto Casabianca
¿Permitiremos que la OMS siga avanzando sin escuchar a los científicos y al pueblo?
Ya en el límite de tiempo para oponerse...
Por Roberto Casabianca (*)
Para llegar a lo verdad antes hay que expulsar los miedos".
Platón
La salud mundial se encuentra envuelta en una serie de reformas por parte de la OMS que pasan desapercibidas por la reserva con que se manejan y que, al indagar con profundidad y pese al secretismo, se observan decisiones que afectarán seriamente derechos humanos fundamentales.
Veamos lo que considero muy importante:
1) La OMS es una organización no democrática y se le otorgaría el poder absoluto a su director Adanom Thedros Gheberyesus, con pérdida de la soberanía en salud.
Es todo tan absurdo escapando a nuestra comprensión que, delegados de 194 países, no elegidos democráticamente y que por lo tanto no rinden cuentas de sus actos y, en gran parte desconocidos, tendrán el poder de acordar y dejar firmes las modificaciones elaboradas muy rápidamente.
La Organización pese a sus tremendos desaciertos, está intentado quitar nuestras libertades, nuestros derechos humanos y nuestras decisiones personales con respecto a la salud.
Lo lograría en su Asamblea de mayo del corriente año con dos eventos legales separados: el nuevo Tratado Pandémico y las enmiendas al Reglamento Sanitario Internacional que tienen un objetivo final común.
Con la firma del Tratado, lograrían el objetivo que sería poder vender y exigir el uso de productos farmacéuticos como lo hicieron con la terapia génica del Covid-19 con las que tuvieron ganancias astronómicas las grandes empresas del sector farmacéutico que son las más importantes aportantes para la existencia de la organización.
Por ello el Director General de la OMS tendrá la autoridad para declarar una alerta de acción temprana, una emergencia pandémica o una emergencia de salud pública internacional sin supervisión ni control alguno.
2) Al suprimir la expresión "no vinculante" todas las medidas pasarán a ser "vinculantes".
Recordemos que hasta ahora la OMS solo formulaba recomendaciones. Si se suprime la expresión "no vinculante" como sostienen, todas las medidas pasarán a ser vinculantes y por lo tanto de cumplimiento obligatorio.
Al otorgarle jerarquía institucional, sus recomendaciones ya no serán tales al transformarse en jurídicamente vinculantes, por lo cual ningún juez podrá alegar o hacer sentencia a favor de los derechos humanos y de la violación de la vida y de la salud, que una persona pueda demandar en relación a aplicaciones, normativas, o tratamientos que se puedan proponer.
Ante las críticas formuladas, Ghebreyesus ha manifestado que la soberanía de los pueblos no iba a desaparecer con las modificaciones y, es claro que, si se aceptan las mismas en forma oficial, no desaparecen a partir de la aceptación y el sometimiento de los países a esta situación con la pérdida de su soberanía.
3) Agregado a la determinación de "Emergencia de salud pública de importancia internacional", se le permitirá declarar todo tipo de emergencia de salud pública por cualquier motivo, sin ninguna responsabilidad de normas claras, sea para luchar contra la gripe humana con la aparición de un nuevo subtipo de virus, o para reducir el creciente nivel de dióxido de carbono, o para responder a la pérdida de biodiversidad o para luchar contra el cambio climático, todo esto puede dar lugar a la próxima pandemia.
Los alcances son para todo riesgo en salud y no solo en salud pública.
El agregado de "una emergencia de salud pública de importancia regional o de una alerta intermedia de salud", le permitirá declarar las emergencias ante cualquier amenaza potencial o real para zonas extensas, ya sean biológicas, climáticas o medioambientales, sin las pruebas adecuadas y decidiendo por si sola las medidas a tomar y los medicamentos que se impondrán a la población sin el consentimiento informado como sucedió con las "vacunas" del Covid.
Respecto a esto último y a lo que no ocurrió con las "vacunas" del Covid, recordemos lo que el Código de Nuremberg sostiene: "El consentimiento del sujeto humano es absolutamente esencial", que retomara el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos contra la experimentación involuntaria en su texto de 1966, que establece: "Nadie podrá ser sometido sin su consentimiento a experimentos médicos o científicos", lo que ya se había sostenido en la Declaración de Ginebra de la Asamblea Médica Mundial en 1948.
4) Eliminación del respeto a los derechos humanos. En el artículo 3 se elimina la frase "en la implementación de estas políticas el respeto por la dignidad, derechos humanos y las libertades fundamentales" con todo lo que ella significa y que no amerita comentarios por su gravedad.
5) Censura. La libertad de expresión quedará totalmente invalidada al disponer "Contrarrestar la difusión de información falsa y poco fiable sobre eventos de salud, medidas preventivas y anti epidémicas y actividades en los medios de comunicación, redes sociales y otras formas de difundir información".
¿Quién determinará si la información es falsa? Obviamente la OMS que junto con otros grupos se ha negado sistemáticamente a sostener debates sobre muchísimos puntos de discusión. Ya hemos padecido la censura de la OMS durante el Covid-19 con lo que de aprobarse las enmiendas, se le otorgará la autoridad suprema global para eliminar la libertad de expresión y el libre intercambio de información con lo cual se privará a los individuos decidir sobre la actitud a tomar respecto de las medidas sugeridas para preservar su salud.
Recordemos que por el carácter vinculante del Tratado si se firma, ningún juez podrá no involucrar a un imputado en sostener una información falsa denunciada por parte de la OMS.
6) Ganancia de función. Se denomina "Ganancia de función" a las modificaciones genéticas de un microorganismo con un fin favorable para la humanidad pero, también se los puede hacer más contagiosos y más letales.
La OMS asignará al Comité Científico Asesor integrado por expertos, una tarea que es muy grave cual es "supervisar la investigación contra los patógenos potencialmente pandémicos e incluir a la Ingeniería Genética en investigación de Ganancia de Función".
Con esta redacción evidentemente no se opone a la Ganancia de Función, desconociendo lo que sostienen algunos autores respecto del origen del SARS-CoV-2 creado y liberado intencionalmente o bien como producto del escape por un accidente de algún laboratorio.
La investigación sobre este tema puede generar avances significativos, pero también grandes desastres como la elaboración de armas biológicas y riesgos por la posibilidad de consecuencias imprevistas por lo que son necesarias normativas muy precisas y una supervisión estricta. ¿Las puede dar la OMS?
7) Cuarentena, documentos necesarios para viajar, vacunas aprobadas para uso de emergencia. Se hacen recomendaciones respecto a las personas, mercancías, equipajes, cargas, medios de transporte, paquetes postales.
Respecto de las personas se podrá requerir exámenes médicos, requerir el comprobantes de vacunas o de otras profilaxis como también poner a las personas sospechosas bajo observación de salud pública implementando cuarentenas u otras medidas sanitarias para los mismos pudiéndoseles negar el ingreso a otros países.
Respecto a los equipajes, cargas, contenedores, medios de transportes, mercancías, paquetes postales o restos humanos, para eliminar infecciones o contaminación, incluidos vectores y reservorios se podrá incautar y destruir aquellos infectados, contaminados o sospechosos.
8) Impedimento del uso de tratamientos no avalados por la OMS. En el artículo 43, y esto es gravísimo, se encuentran medidas adicionales sanitarias en que la OMS podrá hacer recomendaciones sanitarias adicionales al Estado Parte para que modifique o rescinda medidas adicionales que haya tomado por considerar la organización que las mismas son desproporcionadas o excesivas, con lo cual podrán impedir la utilización por ejemplo de la Ivermectina como ocurrió con el Covid 19 en donde solo aconsejaba pero ahora puede exigirlo.
Conceder más poder a la OMS sin una evaluación crítica de su desempeño en el pasado con el Covid-19, sin garantías adecuadas de transparencia y rendición de cuentas es avanzar hacia un totalitarismo sanitario.
Como sostuvo el investigador irlandés David Thunder en una entrevista que le realizara Agustina Sucri en La Prensa, "el grado de incompetencia, irresponsabilidad, falta de profesionalismo y conflictos de intereses al que ha llegado la entidad sanitaria mundial es tan grande, que exige su exterminio político". Y sostiene: "La OMS es la última organización a la que confiaría el cuidado de la salud de mis hijos".
No puede postergarse más un debate público por estos motivos.
(*) Bioquímico